-¿En qué contexto surge la violencia familiar?
-Perú como muchos países latinoamericanos ha vivido épocas con diversos tipos de violencia (social, económica, cultural, militar, institucional, familiar) que tuvieron su máxima expresión con el terrorismo subversivo y el terrorismo de sectores paramilitares, entonces existía una inseguridad extrema. Hasta era muy difícil trabajar sobre todo para los psicólogos sociales y comunitarios, porque el terrorismo rechazaba su trabajo, el terrorismo solo buscaba agudizar la crisis y tomar el poder para implantar un régimen genocida y antidemocrático.
Esta violencia no es reciente, son cientos de años de exclusión y exterminio de los sectores indígenas, de un fuerte centralismo, y las provincias se sienten violentadas. Producto de ello, la migración a las ciudades fue intensa, en su mayoría para vivir en pobreza en sectores marginales.
Se esperaría que la población se organice para superar estos problemas, pero los partidos políticos entran en crisis y su liderazgo era cada vez menor, eran vistos como ajenos al pueblo. Todo eso favorece aparezca un régimen como el de Fujimori donde se incrementa el narcotráfico y la corrupción, esto fue posible porque los partidos ya no se veían como alternativa.
Además, las instituciones son violentas, como el poder judicial, bien dice la letra de una canción cuando el pobre roba medio la justicia lo estrangula, cuando el rico roba miles hasta la justicia lo adula, la población se siente violentada por eso. La escuela también es violenta, lo que antes se conocía como matonería, en la actualidad se ha agudizado y es lo que se conoce como acoso escolar o bullying, con casos donde algunos niños han quedado inválidos o han muerto. Pero es violencia también cuando se dan casos de abuso sexual por parte de algunos profesores.
Se dice que esto se puede superar con educación, pero la educación mejoró incorporando aportes científicos y tecnología, pero en termino de horas y cumplimiento curricular empeoró, casi no se formaba en valores.
A su vez, los medios de comunicación difunden muchos programas con contenidos violentos. Son sensacionalistas y buscan todo convertirlo en espectáculo que todos se conviertan en vedettes, pocos son los casos de programas educativos, estos se dan más por cable.
Pero este problema parte de las familias. Pero, las familias a su vez están en una crisis cada vez mayor, muchas cumplen pésimo su labor de socialización, donde o bien hay desapego o permisividad.
La época terrorista dejó una generación joven decepcionada, sin utopías, algunos caen en fuerte individualismo; algunos caen en actos delictivos como las barras bravas, pandillas, narcotráfico, mafias, bandas; paralelamente ingresan también sectores mafiosos y delincuenciales del extranjero.
Los jóvenes no tienen por qué morir, porque no hay motivos físicos ni de salud, pero mueren absurdamente victimas de la delincuencia o de los accidentes de tránsito y esto nunca cambia, eso es violencia. Hay jóvenes que son secuestrados para chantajear a las familias, para robarles o para violarlas.
El proceso de socialización se ve afectado, eso se ve en todo el mundo en lo que se llama la generación X, Y, Z, que tiene una serie de aspectos negativos de relación, egoístas, manipuladores, sin límites. Creo esto parte porque se forman parejas simbióticas, a veces patológicas, porque muchas veces solo está presente la pasión, pero no el afecto y el compromiso.
Pese a todo lo mencionado, hay muchos jóvenes resilientes, que obtienen puntajes altísimos en los exámenes universitarios, que son creativos, que crean empresas, pero tienen que sortear mil obstáculos. Encima tienen que vencer envidia, disgusto por el éxito del otro, el fatalismo, la desesperanza.
-¿Qué factores sociales incitan a que suceda un episodio de violencia?
-Creo que influye lo cultural, en Perú es multifactorial. Hay sectores muy pobres y caen en la marginalidad y la drogadicción, entran en la delincuencia. Pero hay otros sectores que por afán de lucro caen en actos delincuenciales. Otros que aun teniendo dinero delinquen.
Se ve que muchos jóvenes asumen más bien antivalores. Así, una joven de clase media asesina cruelmente a su madre y al preguntársele si no la quería, dice claro que la quería, el amor el bueno, pero el dinero lo es más. Creo que detrás de un episodio de violencia hay un problema de personalidad, algo de marginalidad, resentimiento, frustración, problema de identidad, discriminación cultural, problemas de autoestima, ausencia del padre sobre todo o familias disfuncionales.
A esto se le asocia un fuerte racismo, que ignoraba a los campesinos que eran asesinados por el terrorismo senderista, y cuando esto fue develado por la Comisión de la Verdad, hasta fueron negados, o sea se ignoraba su existencia. Se rechaza al indio, al cholo, al mestizo, al negro, al blanco, todos entre sí. Entre los intelectuales, igual sucede, se asocia a los grupos humanos por la calidad del pescado y se habla de una “izquierda caviar” para discriminar a los sectores intelectuales de izquierda de mayor nivel, pero al igual se podría decir hay “una izquierda y una derecha furel” de más bajo nivel e ineficiente.
Paralelamente, se da un achoramiento (imitación del comportamiento delincuencial) en algunos pobres y en algunos ricos. El lenguaje muestra el uso de una jerga de fuerte contenido violento.
-¿Se puede prevenir?
-Sí, en diversos campos. Muchos psicólogos hacen gestión del desarrollo humano, promoviendo la participación. Los psicólogos hacen labor comunitaria y social promoviendo los derechos humanos, la igualdad, la ciudadanía. Atienden casos de victimas de la violencia política con estrés postraumático para crear redes solidarias. Algunos hacen trabajos preventivos excelentes en el sector penitenciario. Otros trabajan valores, habilidades con poblaciones.
Otros promueven lo cultural. Por ejemplo, la gastronomía peruana es muy valorada, no creo que lo gastronómico es todo, pero es un valor que es entrada para otros elementos fuertes de identidad como la medicina tradicional, lo cultural, los ejemplos empresariales, la autoestima. No creo que esta comida es indigesta. Creo que lo único indigesto es la corrupción y la violencia, el pesimismo inmovilizador. Ya Basadre decía que los grandes enemigos del Perú son: los podridos (corruptos), los congelados (conservadores) y los incendiados (violentos), igual es en Latinoamérica.
-¿A qué te referís con Violencia Política?
-El ejercicio político debe ser democrático, pero si tú excluyes o ignoras poblaciones como por décadas ha sucedido, eso es violencia. Si tú debes cumplir un rol de liderazgo o autoridad pero decepcionas con actos de corrupción, eres violento. Si tú ignoras las necesidades sociales, eres violento. Si tú niegas lo democrático para imponer tus ideas con las armas, las amenazas, el apoyo a los narcos, tú violentas a todos.
Si todos ven los errores de los partidos políticos, pero lo niegan y nunca los rectifican, eso frustra, han matado lo que lideres ejemplares construyeron. Si tú no te renuevas y das un discurso demagógico, eres violento. Creas desesperanza porque no se cree en ningún político, ni autoridad. O se adopta antivalores fatalistas.
Tiene que afirmarse una moral principista y responsable a la vez, que niegue el cinismo y el afán de vedettización que convierte todo en espectáculo y lo banaliza, es lo que Vargas Llosa llama la civilización del espectáculo.
-¿Cómo puede intervenir un psicólogo allí?
-Educando en el ejercicio de la ciudadanía a diversos sectores de la población, asesorando en la mejor toma de decisiones a los decisores políticos.
Empoderando a sectores que son afectadas por la discriminación, el prejuicio. Promoviendo el fortalecimiento comunal. Donde se promueve el desarrollo social a la vez que se incrementa la participación y su potenciación.
Debe retomarse el desarrollo de programas de prevención integral. La educación sexual en todo el país, las escuelas de padres, la prevención de la violencia escolar y familiar, formando valores y habilidades para la vida.
-¿Cómo se pone en juego la ética personal frente al maltrato y la protección de los trabajadores (burnout)?
-Muchos trabajadores están sometidos a una respuesta prolongada de estrés ante los factores estresantes emocionales e interpersonales que se presentan en el trabajo, provocando fatiga crónica, ineficacia, escepticismo, pérdida de la capacidad de disfrute, impotencia, insomnio, etc. derivando a veces en adicción al trabajo o en otras adicciones.
A veces se busca que el psicólogo adapte a los trabajadores a los intereses de mayor obtención de ganancias de las empresas obviando derechos. Algunos dan solo discursos igualitarios, pero no lo demuestran con sus trabajadores. El burnout surge de situaciones de trabajo violentas.
Si una chica se esfuerza por cumplir su trabajo, se perfecciona, etc., y viene otra que se quiere imponer por el sexo, eso genera fuerte estrés, es producto del machismo tanto por parte del hombre que como autoridad la promueve, como de esa mujer que desplaza a la otra con sexo, eso es violencia.
La ética no puede permitir políticas sobreexplotadoras, normas o exigencias abusivas, ni que se dañe el medio ambiente, actividades donde hay maltrato o discriminación a la mujer o del anciano, se exponga a los trabajadores a situaciones de alto riesgo sin protección, se utilice a niños para hacer trabajos que afectan su salud física y mental.
Debemos integrar los aportes de los modelos ecológico de desarrollo humano, de descompensación valoración-tarea-demanda, el sociológico, de opresión-demografía, de competencia social, de demografía-personalidad-desilusión; para afinar el diagnóstico, detectar y prevenir factores de riesgo, incrementar autoestima, promover satisfacción laboral. Ir hacia una psicología positiva que no solo vea atender problemas sino generar felicidad en el ser humano.
Victor Montero Lopez es psicólogo, especialista en Psicología Social y Comunitaria. Estudios de Maestría y Doctorado Universidad de San Marcos. Estudios de Post Grado: Elaboración de Proyectos Educativos, Evaluación en Intervención Social (AECI- Cartagena), Talleres Ps. Social (U. Venezuela); Políticas de Juventud (OIJ- Málaga España),Currículo y Prevención (UNESCO), Planificación Estratégica y Salud (UNFPA), Fitoterapia (U. Xochimilco México), Técnicas estadísticas aplicadas a prevención del consumo de drogas (OEA). Elaboración de Proyectos (PATHFINDER), Formación en Prevención del Cáncer (Unión Europea), Prevención de SIDA (UNESCO), y otros. Ha laborado en el Ministerio de Salud, Proyecto UNICEF- Salud- Educación, Ministerio de Educación-Programa Prevención Integral y Prevención de la Violencia, Responsable Equipo Técnico del Programa Nacional de Educación Sexual y de la Campaña “Yo se cuidar mi cuerpo”. Directivo de la Asociación Peruana de Psicología Social.